Estos nombres abarcan tanto a los sabios humanos como a seres míticos de naturaleza híbrida (hombre-pez o hombre-ave), relacionados con rituales mágico-religiosos. La versión más antigua de estos sabios es el hombre/pez, conocido como Oan, Oannes, Uanna o U-An. En Babilonia, se los describía como enviados divinos encargados de transmitir sabiduría a la humanidad, llevando consigo los mitos de la creación recogidos en el Enuma Elish.
¿Sabios o astronautas? El verdadero papel de los Abgal
En los mitos sumerios, los Abgal no llegan en naves brillantes ni exigen oro para “salvar su planeta”. No tienen trajes espaciales ni tablets de titanio. Lo más parecido a tecnología que portaban era... una cubeta.
Los Abgal (o Apkallu en acadio) eran considerados sabios enviados por los dioses, especialmente Enki/Ea, el dios de la sabiduría. Su función no era gobernar ni castigar, sino enseñar a los humanos cómo comportarse, cómo construir templos, canalizar agua, y realizar rituales correctamente. Eran más bien instructores divinos que inspiraban respeto, no obediencia ciega.
El mito de Adapa: el sabio que dijo “no” a la inmortalidad
El relato más conocido de un Abgal es el de Adapa, sacerdote de Eridu y primer sabio según la tradición. Un día, los vientos del sur lo derriban mientras pescaba. Adapa, molesto, conjura contra ellos y les rompe las alas. Esto provoca que sea citado ante el dios Anu.
Antes de partir, Enki le advierte: “Te van a ofrecer el pan y el agua de la vida. No los aceptes”. Adapa, obediente, rechaza los dones de Anu. Resultado: el primer sabio de la humanidad... pero condenado a ser mortal. El conocimiento, sí; la inmortalidad, no.
Este mito, aunque breve, ilustra cómo los mesopotámicos entendían la sabiduría: como un privilegio transmitido, no como una fuente de poder ilimitado. Adapa no busca dominar al mundo, solo cumplir su deber.
La Lista de Reyes y Sabios de Uruk
La referencia más antigua a los Apkallu aparece en la Lista de Reyes y Sabios de Uruk, donde se los asocia con diferentes reyes. Antes del Diluvio, cada rey tenía un sabio asignado. Después del Diluvio, la tradición cambia: los Apkallu pasan a ser consejeros humanos eruditos.
Antes del Diluvio:
- Ayalu: Sabio Adapa (primer Apkallu).
- Alalgar: Sabio Uanduga.
- Ameluana: Sabio Enmeduga.
- Amegalana: Sabio Enmegalama.
- Enmeusumgalana: Sabio Enmebuluga.
- Dumuzi el pastor: Sabio Anenlilda.
- Enmeduranki: Sabio Utuabzu (ascendió al cielo).
Después del Diluvio:
- Reinado de Gilgamesh: Erudito Sin-leqi-unnini.
- Reinado de Ibbi-Sin: Erudito Kabti-ili-Marduk.
- Reinado de Isbi-Erra: Erudito Sidu (Enlil-ibni).
- Reinado de Abi-esuh: Eruditos Gimil-Gula y Taqis-Gula.
- Reinado de [...]: Erudito Esagil-kin-apli.
- Reinado de Adad-apla-iddina: Erudito Esagil-kin-ubba.
- Reinado de Nabucodonosor I: Esagil-kin-ubba (continuó su actividad).
- Reinado de Esarhaddon: Erudito Aba-Enlil-dari (Ahiqar entre los arameos).
De sabios tutelares a guardianes imperiales
Con el paso de los siglos, la figura del Abgal cambia notablemente. En la época sumeria (III milenio a.C.), eran sabios tutelares, asociados a la ciudad de Eridu y al templo de Enki. Su presencia era simbólica y estaba limitada al entorno de los templos y las élites.
En cambio, en la era neoasiria (siglo IX a.C. en adelante), los Apkallu aparecen en relieves de palacios como el de Ashurnasirpal II. Son representados con alas, cabezas de ave o pieles de pez, en actos de purificación. Ahora su papel es proteger el orden imperial. Son guardianes rituales, insertos en la arquitectura del poder.
No había un culto público a los Apkallu. Nadie les rendía devoción personal, ni se les erigían templos. Su papel era ideológico y ritual, no religioso en el sentido moderno. Funcionaban como símbolos de sabiduría y protección ligados a la autoridad real.
Los Apkallu en el arte y ritual mesopotámico
Los Apkallu estaban estrechamente ligados a rituales de purificación y protección. Se los representa portando:
- Una piña de árbol (símbolo de purificación).
- Una cubeta ceremonial llamada Banduddu.
- Una bolsa de cestería, posiblemente con polen o retoños de plantas.
Estos relieves son especialmente comunes en los palacios neoasirios, como el de Ashurnasirpal II (siglo IX a.C.), donde se representan en tres formas principales:
- Con cabeza humana y alas.
- Con cabeza de ave.
- Vestidos con piel de pez.
Posibles referencias en textos posteriores
Algunos estudiosos han sugerido que los Apkallu pudieron influir indirectamente en tradiciones posteriores. Por ejemplo, en Proverbios 9:1 se menciona que "la sabiduría edificó su casa y talló siete columnas", lo que podría ser un eco simbólico de los "siete sabios". También se ha propuesto un paralelismo temático entre Utuabzu y Enoc, "el séptimo desde Adán".
En la pseudociencia
En tiempos modernos, algunos autores como Zecharia Sitchin han promovido la idea de que los Apkallu son en realidad Anunnaki, una raza de visitantes extraterrestres. Sin embargo:
- El término Anuna o Anunnaki se refiere a deidades sumerias, "hijos de An", no a seres híbridos representados artísticamente.
- No existen representaciones visuales antiguas de los Anunnaki.
- Las figuras que se suelen mostrar corresponden en realidad a los Apkallu o Abgal.