Mesopotamia

  • Es probable que hayas visto estas figuras en representaciones de diversas culturas de Mesopotamia: criaturas que combinan características humanas con las de peces o seres alados con cabeza de ave. A menudo se les muestra sosteniendo un mullilu (un objeto purificador) para rociar agua de una cubeta ceremonial.

    Los sumerios los conocían como Abgal, mientras que los acadios y, más tarde, los asirios, los llamaron Apkallu, un término que significa "sabio" o "erudito". La literatura mesopotámica los menciona como "los siete sabios", vinculándolos con antiguos reyes míticos. El término Apkallu-Abgal también se usaba como epíteto para reyes y dioses, destacando su sabiduría excepcional.

  • Entre los libros que tenía mi padre había uno que me daba miedo. En la portada había una imagen misteriosa y extraña: tiempo después me enteré de que era Pazuzu, el rey de los demonios del viento en la religión acadia. Eventualmente me armé de valor y comencé a leerlo. Pronto empecé a viajar a épocas remotas y a buscar otros libros de arqueología. Leí sobre el descubrimiento de Troya, de Sumeria, Creta, la tumba de Tutankamón y otras maravillosas historias.

    Dioses, tumbas y sabios (Götter, Gräber und Gelehrte. Roman der Archäologie) no es un libro técnico de arqueología, sino que se puede leer como una novela sobre los fundadores de la disciplina y sus aventuras, que a veces resultan más fantásticas que las de Indiana Jones.