Aclaro que no es que tenga mucha simpatía por el islam actual, pero supongo que entonces deberíamos descalificar a todos los autores cristianos que escriben sobre el islam. Así que decidí comentar sobre mi impresión del libro. No soy especialista, por lo que esto no es un análisis académico, sino impresiones de un lego. Aun así, espero que lo encuentren de interés.
Hecho este "disclaimer", vamos por el libro.
Pero vamos al libro, que es lo importante.

Primero, ¿qué es un zelote?
Los zelotes fueron un movimiento político-nacionalista en la Palestina del siglo I, fundado por Judas el Galileo. El movimiento nació en el año 6 para oponerse al censo romano decretado por Quirino. Como nota curiosa, algunos creen que este es el censo mencionado en los evangelios, lo que fecharía el nacimiento de Jesús en el año 6 (después de Cristo).
El nombre (del hebreo qanaim) se refiere a ser celosos de su religión y a su intransigencia en todos los aspectos. Ellos buscaban una Judea independiente del Imperio Romano sin importar los medios. Esto no solo incluía la lucha armada, sino también el asesinato de los mismos judíos que no estuvieran de su parte, por lo que algunos historiadores los consideran el primer grupo terrorista.
La idea de que Jesús fuera parte del movimiento zelote no es nueva; el historiador Robert Eisler ya la había sugerido, y en eso coincide con otros autores como Joel Carmichael, H. Rodrigues, Maurice Fluegel y Hugh J. Schonfield.
La idea es controversial, pero no debería serlo. Después de todo, para un judío pobre del siglo I, sería muy difícil escapar de los ideales zelotes: ver a su pueblo sometido, esquilmado y, sobre todo, profanado por la presencia romana. Esa fue una época llena de profetas y mesías milagrosos. El problema del rechazo es que el concepto de zelote va en contra del Jesús amable de los evangelios, y ese es el punto central del libro de Aslan.
He estado leyendo el libro y puedo decir que lo recomiendo, independientemente de si se acepta la tesis de Aslan o incluso la existencia de un Jesús histórico. El libro tiene muchas referencias históricas, especialmente en la primera parte, donde se dedica a intentar reconstruir lo que era la Judea del siglo I. Esa parte es fascinante y ayuda a entender mucho la historia del pueblo judío, la destrucción del templo y la diáspora. Tan solo por esa parte creo que vale la pena leerlo.
Por supuesto, surge la pregunta: ¿afecta al libro que Aslan sea musulmán? Después de todo, incluso con todas sus credenciales académicas, la religión siempre tiene peso.
Bueno, resulta que para un musulmán, Jesús fue un personaje real, un hombre inspirado, tal vez un profeta, pero solo un hombre. Afirman que los cristianos deformaron los evangelios para hacerlo ver como el hijo de Dios... y el libro trata justamente de eso. Pero el libro también critica el concepto islámico de Jesús y lo que dice el Corán. Un musulmán fundamentalista rechazaría el libro de Aslan.
Para no extenderme mucho, trataré de explicar la tesis de Aslan:
Aslan comienza con el problema de la historicidad de los evangelios y la existencia de un Jesús histórico. Empieza por poner en duda la veracidad de los evangelios, haciendo énfasis en sus contradicciones históricas y recordándonos que no existe ninguna evidencia real de la existencia de Jesús.
Algo que comenta Aslan me pareció interesante: incluso para la época en que fueron escritos, cualquier romano se habría dado cuenta de que contienen errores históricos. Por ejemplo, en los censos romanos nunca se ordenaba a la población que fuera a sus lugares de nacimiento. Eso fue un recurso dramático de los autores de los evangelios, y era de conocimiento común para cualquiera que supiera algo de Pilatos. Él había mandado a ejecutar a miles de judíos por cargos mucho menores que los que se supone hicieron contra Jesús. Más aún, difícilmente le habría dado una audiencia: eso era cuestión de sus subordinados. La idea de un Pilatos sumiso resulta muy incongruente. Para Aslan, eso y muchos otros detalles sugieren que a ninguno de los evangelistas ni a sus oyentes les interesaba la verdad histórica; solo era un relato para presentar la doctrina.
Basado en eso, los argumentos de Aslan son: la zona en la que se supone nació y vivió Jesús era profundamente zelote, y en su época ocurrieron muchos sangrientos levantamientos que fueron reprimidos de forma aún más sangrienta por los romanos. Sería imposible no estar rodeado de influencias zelotes, y la serie de actos que relatan los evangelios —curar y sanar sin cobrar, expulsar demonios sin los rituales de los sacerdotes, el enfrentamiento con los sacerdotes— Aslan los interpreta como las acciones de un zelote.
Ahora bien, los zelotes eran considerados por los romanos como hoy veríamos a los terroristas. Promover las enseñanzas de un zelote entre romanos no solo habría provocado rechazo, sino que habría sido peligroso. Por eso, incluso los judíos después de la diáspora buscaron eliminar sus lazos con el movimiento zelote, que puede considerarse responsable de las represalias romanas que terminaron con la destrucción de Jerusalén y la diáspora judía. Los libros de la historia reciente, como los Macabeos, fueron sacados del canon judío, así que según Aslan no sería de extrañar que los cristianos también buscaran eliminar el pasado zelote de Jesús.
Los argumentos de Aslan sobre esto último están basados principalmente en las diferencias entre los evangelios y la transformación de la imagen de Jesús entre el primero y el último evangelio, junto con sus contradicciones históricas y en partes que él cree que pudieron ser las más antiguas, y que lograron pasar la censura de los evangelistas.
Es en esta parte donde siento el argumento más débil, puesto que al principio del libro Aslan explica que hay poca evidencia de la existencia de Jesús y que los evangelios no son confiables, para luego basarse en ellos para intentar reconstruir el pensamiento de Jesús.
Conclusión:
No soy especialista para saber qué tan correcto es el análisis de Aslan de los evangelios, pero para todo el que le interese el tema, este libro debería ser una lectura recomendada y casi obligatoria.
Lectura recomendada:
Zealot: The Life and Times of Jesus of Nazareth — por Reza Aslan